Washington, DC, Estados Unidos, 7 de junio de 2019, México Ambiental. – El pasado 1 de junio empezó la temporada de huracanes del Atlántico 2019. Sin embargo, no hay temporada baja para este tipo de tormentas tropicales las cuales afectan al mundo de una u otra manera durante el año.
Gracias a la Nasa, se pueden aprovechar distintos puntos de vista de la tierra desde el espacio para ayudar a las comunidades del mundo a planificar y recuperarse de estos eventos que a menudo amenazan la vida de las personas.
Con estos datos proporcionados por la NASA, se realiza un mapa de cortes de energía provocados por tormentas y ayudan a monitorear el proceso en la restauración de energía.
También se pueden simular exploraciones casi en tiempo real de mareas interiores e inundaciones, lo que permite que los gobiernos tomen decisiones para implementar las acciones necesarias.
Otra de las ventajas de este monitoreo es el registro del daño generalizado a la vegetación y la recuperación de los ecosistemas. Esta información es crucial, especialmente para áreas remotas donde las observaciones en persona son difíciles.
Este año, la NASA ya ha ayudado en la respuesta a los ciclones Idai y Kenneth que afectaron a Mozambique en marzo y abril, respectivamente. Combinadas, las tormentas provocaron la muerte de más de 1.000 personas y el desplazamiento de casi 180.000. Para ayudar en la recuperación, nos pusimos en contacto con funcionarios y personal de respuesta para identificar los tipos de información que la NASA podría contribuir. Luego, reunimos paquetes de datos específicos para las necesidades de los funcionarios locales y los encargados de tomar decisiones a nivel nacional.
Durante el 2018, se utilizaron datos de la NASA para ayudar a evaluar la amenasa de deslizamientos de tierra cuando el huracán Willa azotó la costa suroeste de México en octubre.
También en ese mismo mes, antes y después de que el Super Tifón Yutu tocara tierra en las Ismas Marianas del Norte, se logró la elaboración de mapas previos y posteriores al evento que ayudaron a los gobiernos a analizar el daño en un amplio tramo de la cadena de islas.
El objetivo de la NASA en este tiempo de huracanes es anticipar el riesgo y ayudar a aliviar los impactos proyectados por estos fenómenos naturales.