Madrid, España, 29 de marzo de 2019, ABC. – España es el país de la Unión Europea donde más luz se consume por habitante cada año. Y es, también, uno de los estados miembros con mayor contaminación lumínica, por delante de Alemania o Francia, por ejemplo, aseguran desde Imaginis, empresa especializada en sistemas audiovisuales que ha querido sumarse, así, a la celebración de la Hora del Planeta (30 marzo), iniciativa liderada por la organización WWF.
Los tonos azules o blancos son los que más contaminación lumínica producen; mientras que los más cálidos o anaranjados contribuyen a reducirla.
La contaminación lumínica, de hecho, supone una de las seis amenazas que, según un reciente estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ponen en peligro la conservación de las pardelas y los petreles (dos especies de aves marinas que se enfrentan a un riesgo elevado de extinción).
Pero este tipo de iluminación excesiva no sólo perjudica al medio ambiente, sino que también afecta a la salud de las personas (alteraciones del sueño, estrés y obesidad, de acuerdo con la Asociación Médica Americana).